Shane Callahan, un fanático de los Medias Blancas de 11 años, le había pedido, antes del juego, un jonrón al toletero cubano José Abreu, quien pudo complacer al pequeño, quien está siendo sometido a un tratamiento contra el cáncer con este tablazo.
Shane Callahan, un fanático de los Medias Blancas de 11 años, le había pedido, antes del juego, un jonrón al toletero cubano José Abreu, quien pudo complacer al pequeño, quien está siendo sometido a un tratamiento contra el cáncer con este tablazo.