El exbasquetbolista estadounidense Dennis Rodman obsequió en Pyongyang a un ministro norcoreano un ejemplar de «The Art of the Deal», el best-seller en el que Donald Trump revelaba en 1987 la receta de su éxito, según un video difundido este jueves.
El excéntrico exjugador, auténtica gloria de los Chicago Bulls, quien ya ha visitado al menos cuatro veces Corea del Norte, llegó el martes para un nuevo episodio de su muy controvertida «diplomacia del básquet».
Luciendo camisa rosada, traje azul y con las uñas pintadas de verde, el cincuentón coleccionista de piercings fue filmado por la agencia estadounidense Associated Press en el momento en que entregaba sus regalos al ministro de Deportes norcoreano, Kim Il-Guk.
Además del ejemplar de la obra publicada en 1987, figuran también un libro de la serie «¿Dónde está Wally?», jabones y dos camisetas que Rodman le dedicó ante cámaras.
Interrogado sobre el sentido de esta visita controvertida, en un momento de gran tensión en la zona, el excompañero en los Bulls de Michael Jordan explicó el martes a la prensa, antes de embarcar con destino a Pekín, que intentaba «sólo abrir una puerta».
Preguntado si había hablado con el presidente estadounidense antes de comenzar este viaje, respondió: «estoy casi seguro que él está más bien contento de que esté aquí intentando concretar una cosa que ambos necesitamos».
Un responsable de la administración Trump, no obstante, aseguró a Fox News que Rodman realizaba este viaje «a título personal».
Escrito por Tony Schwartz, «The Art of the Deal», que contribuyó a forjar la reputación de hombre de negocios astuto del actual presidente estadounidense, fue un éxito desde su aparición, vendiendo más de un millón de ejemplares.
Partidario declarado de Donald Trump en las últimas elecciones presidenciales, Rodman también conocía al actual presidente estadounidense por haber participado, cuando éste era animador de telerrealidad, en su programa «The Celebrity Apprentice».
Quien fuera apodado «The Worm» («El Gusano») cuando se lucía en los rectángulos, en 2014 fue blanco de una avalancha de críticas por haber cantado «¡Cumpleaños Feliz!» a su «amigo para toda la vida», el máximo dirigente norcoreano Kim Jong-Un.
Estos viajes han causado vivas controversias en Estados Unidos, donde algunos acusaban al exjugador de simpatizar con el dirigente de un régimen totalitario.
Fuente: AFP