Al contrario de Venezuela, en países como España y Estados Unidos se paga anualmente un impuesto personal, de un porcentaje bastante alto, y que a veces sube mientras más alto sea tu sueldo. Por esto es normal que un artista famoso o un deportista llegue a pagar quizás 1 millón de euros de impuestos, que salen de su enorme sueldo. Debido a lo ya mencionado, y motivados por la avaricia, muchas veces los famosos logran «darle la vuelta» al sistema para pagar menos de lo que deben, para así embolsillarse más plata. Si las agencias de Hacienda del estado los descubren enfrentan penas que les hacen pagar lo que deben al estado más multas por cantidades altísimas o incluso prisión, dependiendo del caso.
Por eso es que has oído últimamente mucho sobre jugadores del fútbol español que se han visto envueltos en escándalos de este tipo, algunos culpables y otros inocentes, y sin discriminar fama, pues hasta Messi ha estado metido en cosas así. Los jugadores prefieren muchas veces hacer artimañas elaboradas para evitar que les quiten grandes cantidades como impuesto. Aquí en FarandiSport compilamos varios casos que han sucedido a lo largo de los años, de jugadores de la liga española, o equipos europeos, que han tenido problemas con los impuestos.
Alexis Sánchez
El chileno es el caso más reciente de este tipo, y fue el que nos motivó a realizar este artículo. El jugador acumuló una enorme deuda con el estado durante su paso por Barcelona, las autoridades aseguraron que debía cantidades que sobrepasaban los 500,000 euros, correspondientes a las declaraciones de impuestos de 2011, 2012 y 2013.
Se sabe que los jugadores con sueldos astronómicos como Sánchez evitan poner sus propiedades a su nombre para evitar que se las quiten en caso de surgir problemas con el fisco, pero en el caso de Sánchez no fue así, y el estado le embargó una lujosa casa que tenía en Barcelona, valorada en varios millones de dólares, como pago por apenas una parte de lo que debe.
Javier Mascherano
El argentino se las vio negras a principio de este año, pues casi va preso por no pagar lo que le tocaba. Mascherano cedió los derechos de su imagen a varias empresas extranjeras entre los años 2011 y 2012, y con ello ganó más de 1,5 millones de euros, cantidad que decidió no declarar para impuestos. Cuando el departamento de hacienda español se dio cuenta, decidió imponer al jugador una multa de 815,000 euros más una pena de año y medio de cárcel. Mascherano colaboró y pagó lo que debía más intereses antes de que la ley se lo exigiera, y de paso aceptó su culpabilidad ante el juez, alegando que no sabía que tenía que declarar ese dinero.

Debido a su cooperación con la investigación, el juzgado le permitió cambiar su pena de prisión, para en vez de ello pagar una multa, y como no tenía antecedentes penales y la pena era corta, se salvó de ir tras las rejas.
Lionel Messi
El compatriota de Mascherano tuvo un caso muy parecido a su paisano. Por no declarar lo que ganó en derehos de imagen, entre 2007 y 2009, Messi acumuló una deuda de más de 4,5 millones de euros, que aunque ya se los pagó al estado, sigue siendo perseguido por el delito fiscal y ya se le condenó a dos años de prisión por unos cargos, sentencia que no cumplirá por los mismos motivos que Mascherano. Sin embargo aún enfrenta un juicio por cargos adicionales, junto a su padre, quien es el que le maneja las finanzas al delantero. La pena puede ser hasta de 31 meses en prisión para ambos.
Neymar
El joven astro brasileño arrastra problemas fiscales desde Brasil incluso. Cuando era jugador del Santos, el departamento de hacienda le embargó un yate y un avión privado como pago por una millonaria deuda, y ahora es acusado de cargos similares en Barcelona. Aunque no está en riesgo de ir a prisión, si podría enfrentar una multa que asciende a los 45 millones de euros.
Samuel Eto’o
La fiscalía española pidió penas que suman 10 años y 6 meses de cárcel para el exjugador del Barcelona Samuel Eto’o, y su representante, José María Mesalles, por cuatro delitos contra la Hacienda Pública en los ejercicios de 2006 a 2009, así como el pago de indemnizaciones y multas que superan los 18 millones de euros.
El fiscal explicó que, el jugador camerunés obtuvo en los ejercicios de 2006 a 2009 importantes ingresos derivados de la cesión de sus derechos de imagen a la marca deportiva Puma y al FC Barcelona, que deberían haber tributado como rendimientos del capital mobiliario en sus declaraciones del IRPF, pero que el futbolista no declaró. El caso aún está sin resolver.