Ser futbolista, y más si eres una estrella internacional del balompié, es quizás una de las mejores profesiones del mundo: te diviertes haciendo lo que te gusta y te pagan por ello, ganas muchísimo dinero y obtienes cosas a menudo inalcanzables como millones y millones en tu cuenta bancaria, lujo, casas, fama y reconocimiento y quizás más mujeres de las que te puedes imaginar.
Todo eso suena perfecto, color de rosas, pero el fútbol y la fama y dinero que pueden obtener algunos a través de él también tiene un lado oscuro, pues muchos piensan solo en vivir el momento cuando están jóvenes, y no se ponen a pensar en el futuro, por lo que despilfarran lo que tienen en lujos y fiestas, y aunque muchos han caído en eso ,pero se han sabido salvar, a muchos otros se los comió el monstruo de la fama y el dinero, y arruinaron sus vidas y quedaron sin una moneda.
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Aquí en FarandiSport te presentamos estos 4 famosos casos de jugadores de fútbol que lo tuvieron todo y luego lo perdieron todo.
Paul Gascoigne
Este inglés tuvo un destacado y recordado paso por el mundo del fútbol entre los años 80′ y 90′. Jugó numerosos partidos en la selección nacional inglesa, protagonizando un recordado momento donde lloró frente a miles de personas que lo observaban en el estadio y la televisión cuando recibió una tarjeta amarilla en la semifinal de Italia, en donde su selección quedó de cuarta.
También tuvo un increíble paso por la primera división inglesa, y en otras como la Serie A, donde jugó con la Lazio; como resultado de jugar en clubes desde 1985 hasta el año 2004, se embolsilló millones y millones de libras, las cuales despilfarró en años posteriores en adicciones y vicios.
El museo nacional inglés del fútbol lo incluyó en su salón de la fama y lo nombró «el mejor centrocampista de su generación». A pesar de todo esto ya mencionado, desde principios de los 90 Paul Gascoigne empezó a tener problemas con el alcohol que persisten hasta el día de hoy; hasta hace 2 semanas estuvo internado en una clínica de rehabilitación, pues tuvo una intoxicación producto de beber demasiada ginebra.
Gascoigne ya se ha declarado en bancarrota varias veces, y vive en un apartamento minúsculo en Londres, donde es víctima habitual de los paparazzis, que lo han pillado en más de una situación penosa, siendo la más recordada cuando lo retrataron bajándose de un taxi para comprar alcohol, vistiendo nada más que una bata. A pesar de haber gastado su fortuna en el alcohol y en apuestas, «Gazza», como le dice cariñosamente en el Reino Unido, suspuestamente ya está (por enésima vez), en el camino de la recuperación.
Garrincha
Cualquiera que sepa algo de fútbol conoce a este grande oriundo de Brasil, tenido por muchos como «el mejor regateador de la historia». Su curiosa historia es conocida por muchos, él tenía una pierna 6 cm más larga que la otra, y aunque en su juventud esto había sido un problema, no le impidió ser campeón del mundo en 1958 y 1962, siendo nombrado jugador más valioso del certamen en 1962. Con el Botafogo brasileño jugó más de 12 años, en los que hizo más de 240 goles, y también ganó muchísimo dinero; «Mané Garrincha» era un jugador muy querido por el pueblo y la fanaticada.
Tuvo problemas con la bebida desde muy joven, y también tuvo problemas de dinero, no sabía administrar bien su fortuna y muchas veces se llegaron a aprovechar de él por ello También tuvo problemas con las mujeres, llegó a tener más de 14 hijos (reconocidos). Llegó a tener múltiples accidentes por manejar borracho, incluso, en uno murió su suegra.
Garrincha se dañó el hígado y el corazón desde temprana edad, y murió en 1983 a los 49 años, solo, abandonado por sus hijos y familia, y pobre, se lo gastó todo en alcohol. Hasta se dice que en cierto punto vivía en las calles. A pesar de ello, Garrincha tuvo el funeral de un héroe, al cual asistieron millones de personas que lo lloraron.
Uno de los estadios construidos para el mundial de Brasil 2014 lleva su nombre, y la fanaticada brasileña lo tiene como uno de los más grandes jugadores de la época de oro del fútbol de ese país, junto a compañeros de equipo suyos como Pelé, por ejemplo.