Conectar más de 30 cuadrangulares en Grandes Ligas con sólo 22 años puede ser una casualidad, aunque no deja de ser alabable, pero si después de conectar esa cifra llegas a la siguiente temporada y en el primer juego conectas dos cuadrangulares en los primeros dos turnos, ya estamos hablando de una estrella que seguramente dará de qué hablar en las Grandes Ligas de Béisbol.
El marabino Odor, además, fue uno de los más destacados bateadores de Venezuela en el Clásico Mundial de Bésibol que fue desastroso para el combinado vinotinto. El segunda base de Texas miró los dos primeros encuentros desde el dugout , pero en la primera oportunidad que tuvo al bate demostró que debía tener un lugar en el lineup y terminó el Clásico disparando dos cuadrangulares y medio, siendo así uno de los pocos venezolanos que se salvaron de las críticas en el pasado Clásico.
Esperemos que Odor logre incluso superar la proyección que tiene en Grandes Ligas y logre consolidarse pronto como uno de los jugadores más valorados en la gran carpa, si sigue manteniendo esos números, seguramente lo será y probablemente sea el «nuevo» Miguel Cabrera venezolano.