La ida de la Supercopa de España que acoge el Camp Nou presenta el primer clásico oficial de la temporada en el fútbol español sin la luz de la estrella Neymar, que voló a París, entre un Barcelona en plena reconstrucción y un Real Madrid que apuesta por la continuidad en una etapa de éxitos.
Un Barcelona aún en construcción recibe al Real Madrid con el objetivo de lograr una victoria que le permita encarar, con garantías, la vuelta de la Supercopa de España, y reafirmar su confianza en el proyecto de Ernesto Valverde.
Mientras el club trabaja, de momento sin éxito, en cubrir el vacío que ha dejado la fuga de Neymar al PSG, la temporada no espera a los azulgranas, que afrontan el primer partido oficial del nuevo curso sin el astro brasileño y con solo tres caras nuevas: las del lateral Nélson Semedo, el central Marlon Santos y el extremo Gerard Deulofeu, que iría con Messi y Suárez, la MSD improvisada, pero también podría ser un factor sorpresa. Ese sería el 4-3-3 que el técnico extremeño ha decidido mantener esta temporada y que se ha convertido en el dibujo de cabecera del estilo Barça.
En la gira norteamericana, los azulgranas practicaron un fútbol atractivo, recuperando la presión alta tras pérdida y derrotando a rivales de entidad como el Juventus, el Manchester United y el propio Real Madrid, al que venció por 2-3, en Miami.
El Real Madrid, por su parte, llega a la cita con el deseo de conquistar el Camp Nou en una muestra de poder que siga asentando su dominio actual en las grandes competiciones tras conquistar la pasada temporada Liga de Campeones y LaLiga Santander. El objetivo del sextete encara su segundo test.
Las malas sensaciones de pretemporada, sin un solo triunfo en ninguno de sus amistosos, las enterraron los hombres de Zinedine Zidane en cuanto hubo algo en juego. La final de la Supercopa de Europa despejó todas las dudas y reapareció el alto nivel competitivo que siempre muestran en las finales.
A ella se apunta Cristiano Ronaldo. y Zidane apuesta a la BBC que completan Benzema y Bale, junto a Isco tras su exhibición en la Supercopa de Europa.
Fuente: Notitarde