Los días no alcanzarán para que el mundo del béisbol deje de lamentar la trágica muerte de José Fernández, este domingo en un accidente de bote.
El lanzador cubano se tragaba a las Grandes Ligas, estaba fuera de lote y vislumbraba un futuro cargado de millones de dólares y éxitos, pero su llama se apagó apenas a los 24 años de edad.
En 2007, con solo 15 primaveras, el derecho desertó de Cuba con su mamá y un grupo de personas. Era el cuarto intento. Todos los anteriores terminaron con él preso por «ser un traidor a Fidel Castro».
«No tengo idea de cómo describirlo en inglés, pero créeme, no quieres saber (cómo fue estar entre las rejas)», confesó sobre sus despiadados compañeros de celda. «Para ellos, sus vidas estaban terminadas. ¿Qué les importaba si te mataban? Era solo un asesinato más».
En la oportunidad que tuvo éxito, a él y al grupo de gente le tocó esquivar balas de los guardacostas isleños. Cuando iban en balsa hacia México, afrontaron aguas turbulentas y en un momento le dijeron que una persona se había caído al océano. Fernández no dudó y se lanzó a rescatarla. Cuando tenía al humano en sus brazos, se dio cuenta de que salvó a su propia madre, Maritza.
«Siempre he sido un buen nadador desde que era un niño, por eso siempre estoy alerta», dijo la figura en una ocasión al Miami Herald. «Me lancé al agua a ayudar a la persona sin importar quién era, imagina cuándo advertí que era mi mamá. Si eso no deja una marca en ti por el resto de tu vida, no sé qué lo hará».
Ramón Jiménez, su padrastro, contó en 2013 que su familia nunca tuvo el deseo de dejar Cuba hasta que el Gobierno los señaló personalmente. Jiménez iba a ser uno de los tantos médicos cubanos que llegaron a Venezuela hace algunos años, pero la dictadura de Castro no le dejó ir, irónicamente porque temía que desertara.
Después de 14 intentos, llegó a Florida con el plan de poder pronto recibir a su esposa y a José, quien en su arribo asistió al Braulio Alonso High School en Tampa. Fue allí donde comenzó la brillante carrera dentro del béisbol que, por desgracia, culminó este domingo.
En 2011, Fernández fue tomado por los Marlins de Miami en el draft colegial de la MLB. La selección fue la 14 en general y llegó en la primera ronda. Únicamente dos años después, en 2013, ganó el Novato del Año de la Liga Nacional, al dejar récord de 12-6 y 2.19 de efectividad, con 187 ponches en 172.2 innings.
Durante esa misma temporada, el dueño de los Marlins, Jeffrey Loria, ayudó a que la amada abuela de José, Olga, llegara a los Estados Unidos. Ambos no se veían desde 2007. Olga era uno de los pilares del estelar pitcher. Siempre, junto con la madre de la estrella, lo veía lanzar en el Marlins Park, celebrando cada out que sacaba su nieto.
Pilla el video del encuentro. Lo sorprendieron mientras daba una emotiva entrevista sobre la deserción y sus comienzos:
Fernández, cuya esposa quedó embarazada recientemente, se sentía súper cómodo teniendo siempre a su esposa, su madre y su abuela en las tribunas del estadio de Miami. ¿Quieres saber por qué decimos esto? Pues en su carrera en Marlins Park ganó 29 juegos, solo perdió dos y tuvo efectividad de 1.49 en 42 inicios.
¿Quieres un contexto para saber qué tan buenos fueron esos números en ese parque? Fácil: Es el único lanzador en la era moderna en triunfar en sus primeras 17 decisiones en casa.
Ningún otro serpentinero ha llegado siquiera a 25 victorias en sus primeros 42 juegos como local. Él tiene 29.
Jugador | Condición | De | Hasta | J | G | P | EFE | JI |
Jose Fernández | En casa | 2013 | 2016 | 42 | 29 | 2 | 1.49 | 42 |
Drew Hutchison | En casa | 2012 | 2016 | 39 | 21 | 7 | 3.67 | 36 |
Monty Stratton | En casa | 1934 | 1938 | 35 | 21 | 10 | 3.60 | 32 |
Smoky Joe Wood | En casa | 1913 | 1920 | 34 | 21 | 5 | 2.13 | 24 |
Don August | En casa | 1988 | 1991 | 40 | 21 | 12 | 3.88 | 30 |
Fernández ponchaba como loco, tenía una capacidad impresionante. De hecho, es el tercer escopetero con más abanicados en sus primeros 76 presentaciones, con 589. Solo lo superan Dwight Gooden (606) y Yu Darvish (626). Glorias como Roger Clemens, Clayton Kershaw y Randy Johnson no llegaron siquiera a 500.
El antillano lo tenía todo para eventualmente pasar a la historia como el mejor lanzador cubano en la historia de las Grandes Ligas, superando incluso al gran «Tiante», Luis Tiant.
Estos son los números que dejó en las Mayores, temporada por temporada:
Año | G | P | EFE | J | JI | IP | H | C | CL | HR | BB | K |
2013 ★ | 12 | 6 | 2.19 | 28 | 28 | 172.2 | 111 | 47 | 42 | 10 | 58 | 187 |
2014 | 4 | 2 | 2.44 | 8 | 8 | 51.2 | 36 | 19 | 14 | 4 | 13 | 70 |
2015 | 6 | 1 | 2.92 | 11 | 11 | 64.2 | 61 | 21 | 21 | 4 | 14 | 79 |
2016 ★ | 16 | 8 | 2.86 | 29 | 29 | 182.1 | 149 | 63 | 58 | 13 | 55 | 253 |
4 Año | 38 | 17 | 2.58 | 76 | 76 | 471.1 | 357 | 150 | 135 | 31 | 140 | 589 |
Si aún no quedaste convencido de que el tipo era un fenómeno, te traemos unos gifs a lo bien para que quedes loco:
Jesus pic.twitter.com/3Z17mqHCxP
— Cyber Humanu (@ManuclearBomb) September 25, 2016
Tenía esta maravillosa curva:
Pero también te podía dejar en ridículo con esta recta:
Podía batear:
— Cyber Humanu (@ManuclearBomb) September 25, 2016
Pero también reconocía y respetaba al rival:
Just gonna watch this Jose Fernandez/Troy Tulowitzki GIF a whole bunch of times today. pic.twitter.com/uiOabv0tVM
— Matt Lindner (@mattlindner) September 25, 2016
This one is great… pic.twitter.com/E77qRg92o3
— Ryan M. Spaeder (@theaceofspaeder) September 25, 2016
Se gozaba el juego como nadie:
Pero lamentablemente este fue su último pitcheo, el martes en el octavo episodio ante los Nacionales, contra quienes se desempeñó a su manera: con victoria, 8.0 entradas en blanco y 12 ponches:
Jose Fernandez’s Last Out in the Major Leagues. Very Awesome. pic.twitter.com/uqaJBX34T7
— Windy Wrigley (@WindyWrigley) September 25, 2016
¡Sigue disfrutando donde quiera que estés, campeón!