Si algo tiene el béisbol es que es un deporte para todas las formas y contexturas: flacos, altos, bajos, corpulentos y… ¡gordos! Hombres inmensamente gordos y obesos nos hacen pensar que estamos viendo una pelea de sumo.
Sin duda, estos están comiendo sin sal. No hacen más que desear meterse una papa, incluso cuando están en el terreno. Lo peor es que a veces hacen el ridículo en pleno juego.
El nuestro: Pablo Sandoval (Medias Rojas de Boston) Kilos al comienzo de la temporada: 115.7
A este tipo simplemente ya no le creemos cuando dice: «tengo que rebajar, voy a hacer dieta». En numerosas ocasiones sube y baja de peso. Su barriga parece un trampolín y la camiseta XXXXXXXL que usa de los Medias Rojas parece quedarle pequeña.
Él no deja de hacer el ridículo. Este año perdió su puesto y apenas disputó tres juegos antes de lesionarse. Fue el hazmerreír al principio de esta temporada cuando su correa perdió una dura batalla:
No pudo soportar tanta presión, el cinturón pasó a mejor vida.
Lo cierto es que cada vez que al «Kung Fu Grasa» se le ocurre decir que hará dieta, sabemos que es un cuento más. Quizás pierda kilos, pero como no le gusta perder, los volverá a aumentar. ¡Pablo, no nos engañes!
El bárbaro: Jumbo Díaz (Rojos de Cincinnati) Kilos al comienzo de la temporada: 127.0
Aunque este no es el más pesado de la lista, pareciera que lo fuera. Tiene una lipa que no pasa desapercibida en ningún juego en el que actúa. Los botones de su uniforme amenazan con convertirse en proyectiles en cualquier momento.
Es tan barrigón y tan grande que el número que lleva en su espalda, junto con el apellido (Díaz), se ve chiquitico en comparación a otros jugadores.
Lo más interesante de todo es que este dominicano tira más de 95 millas por hora y domina con su equipo. En tres años de carrera en Grandes Ligas no ha tenido un año notablemente malo pese a su gigante humanidad, que debe llenar gran parte del clubhouse. Esperanza para los voluminosos.
De los Rojos, es el de mayor peso y por unos cuantos kilos. Alfredo Simón es el próximo en la lista de ese club, con 120.2.
El «majomenos»: Billy Butler (Yankees de Nueva York) Kilos al comienzo de la temporada: 117.9
Este primera base mediocre dejó de ser bueno hace uffff. Actualmente está intentando revivir su carrera con los Yankees de Nueva York, mientras exhibe su barrigota en el mítico uniforme rayado.
Compara la foto anterior con esta de los primeros años de su trayectoria, con los Reales de Kansas City:
¡Hey, Billy! No es por nada, pero…
El jeque: CC Sabathia (Yankees de Nueva York) Kilos al comienzo de la temporada: 136.1
Como dicen por ahí: «este es el que es». De la lista, es el que tiene más plata, por el contrato de ocho temporadas y 182 millones de dólares que tiene con los neoyorquinos. Aparte es el más pesado de las Grandes Ligas actualmente y el segundo en la historia, solo por detrás del fallecido Walter Young, quien pesaba 145.2 kilos.
Además de que ha tenido problemas con el alcohol, Sabathia sigue sin disminuir esa panza que año a año le cuelga más y más. Cada vez que termina su mecánica, son segundos de comedia. Un bulto de grasa se le acumula en lo más bajo de su barriga.
¿Preparado? Mira esta mantequilla, casi literalmente:
Encontramos esta foto extraoficial de lo que hace Sabathia cuando no lanza. Son fuertes, no aptas para menores de edad:
Superando esa fuerte foto, sigamos…
El querido por todos: Bartolo Colón (Mets de Nueva York) Kilos al comienzo de la temporada: 129.3
El popular, el bonachón, el gracioso y la sensación. Así hay que describir en el presente a Bartolo Colón, quien se ha convertido en un blanco de marketing para las Grandes Ligas y los Mets en especial. Su peso y edad (43), la razón.
A este hombre no le importa hacer el ridículo, se ríe de sí mismo y de las cosas divertidas que le pasan en el terreno de juego. Cada vez que va a batear es un show por su gran humanidad:
Pero lo cierto es que es este al que menos podemos criticar. Aunque vamos a estar claros, no vamos a mentir. La realidad es que está así:
Pero sigue lanzando a lo grande. Su récord de 14-7 y 3.12 de efectividad así lo dice. Por eso cuando abres, así te vemos, Bartolo:
Mención honorífica:
El que se fue: Prince Fielder Kilos al comienzo de la temporada: 124.7
A este simplemente no lo podíamos dejar pasar. Sabemos que ya se retiró, pero comenzó esta temporada en el terreno. Cada vez que Fielder daba un paso corriendo, temblaba el estadio y parecía que él se fuera a desarmar o de pronto fuera a resbalarse y a hacerle una plancha al terreno.
Lamentablemente, ya no lo podremos ver más porque las lesiones lo obligaron a retirarse muy joven.
Pero tranquilo, Prince, ya puedes irte a casa a seguir en lo tuyo…