Casos irónicos como este no es primera vez que vemos. Todos saben que el equipo Tigres de Aragua es propiedad de la gobernación de ese estado, encabezada hasta semanas recientes por Tareck El-Aissami, conocido personaje de las altas esferas chavistas (y conocido narco y promotor del terrorismo), que ahora es vicepresidente de la república.
La actual gobernadora es la ultra chavista Caryl Bertho (una de esas chavistas que ha estado en todos los cargos habidos y por haber), y por supuesto, la directiva del equipo también se inclina hacia el gobierno, especialmente el presidente del equipo, y de paso, gerente general de la selección de béisbol de Venezuela, Carlos Guillén.
Bueno, ese equipo es parte de un gobierno que sumió al país en una profunda crisis económica y de escasez, gobierno que causó que no hayan medicinas, y que, de paso, niega que dicha escasez exista; para ellos vivimos en un bello mundo de fantasía donde nada falta y todo es perfecto. Hasta han llegado a devolver barcos que traían medicinas en calidad de ayuda humanitaria, ‘porque no las necesitábamos’.
Entonces, si el equipo y su directiva son parte del oficialismo, deben creer lo mismo que ellos, ¿no?. Si es así, entonces ¿por que tuitean a través de su cuenta oficial para pedir medicinas? ¿no vivíamos en un mundo perfecto donde nada nos falta?
A ver, te explicamos. Seguro recuerdas a Jairo Rodríguez. Sino, te refrescamos la memoria.
Él fue hasta hace muy poco catcher de los Tigres, y participó bastante en la temporada de la LVBP que finalizó hace no mucho. Decidió retirarse como jugador para convertirse en entrenador, y una academia de los Mellizos de Minnesota en República Dominicana contrató sus servicios, pero lamentablemente fue víctima de un atraco en el que le dispararon en el abdomen, que le impidió irse.
Eso sucedió hace semanas ya, en su ciudad natal de Acarigua, estado Portuguesa, y aún está hospitalizado sin poder ir a trabajar en Dominicana. Él requiere el medicamento Colypan, que sirve para problemas de digestión, como dijimos, le dispararon en el estómago, y el equipo, siendo bastante solidarios, se ofreció para ayudarlo a encontrar la medicina, que debido a la escasez, no se consigue.
Ajá, pero ¿no era que aquí no faltaba ni comida ni medicamentos?, ¿y entonces?.
Ojo, nosotros esperamos que Jairo Rodríguez se recupere lo más pronto posible y que pueda seguir su carrera de manera exitosa, además, qué culpa tiene el de que la medicina no se consiga, o de que el equipo sea chavista; pero nos parece una hipocresía muy grande el hecho de que el equipo, por un lado, apoye a un gobierno que niega la crisis, pero tome acciones por otro lado que evidencien que dicha crisis es muy real. Así es Venezuela.