Una vez más la selección venezolana de béisbol pasó sin pena ni gloria por el Clásico Mundial, o más bien, con mucha pena y poca gloria. Sólo ganó dos juegos, ambos contra Italia, un país con escasa tradición pelotera; todo lo contrario a Venezuela. La selección logró anotar 28 carreras en el certamen, pero le encajaron 56.
Parece que el tener a los más grandes peloteros de esta generación, como Miguel Cabrera o Carlos González, no nos ayuda en nada. Pareciera que estas grandes estrellas solo saben funcionar en equipos en lo que pueden destacar en solitario, como José Altuve en los Rangers, por ejemplo, y que no pueden funcionar exitosamente como un equipo, siendo todos iguales y no grandes estrellas que destacan.
Y lo más triste es que previo a este certamen beisbolistico las esperanzas eran altísimas; mucho se esperaba de estas grandes figuras, y de la promesa de que Omar Vizquel como nuevo mánager nos llevaría siquiera a un tercer lugar. Logramos el octavo.
Todos vimos esperanzados las publicaciones en Instagram de la cuenta de la selección, donde mostraban los entrenamientos, y hasta en las cuentas personales de los peloteros los vimos actualizándonos en cuanto a los progresos de la novena criolla.
De hecho, muchos decidieron incluso publicar mensajes esperanzadores luego de haber sido eliminados y posteriormente apaleados por Puerto Rico; imágenes que decían que a pesar de los resultados, se seguían sintiendo más venezolanos que nunca, y que estaban orgullosos de haber participado en el torneo.
Pero parece que no todos fueron capaces de soportar las penosas derrotas y la eliminación, y debe haber quizás los que se apenan de haber participado en aún otro intento fallido en el Clásico Mundial.
Podemos decir que Miguel Cabrera es probablemente uno de ellos, pues cuando nos disponíamos a revisar su cuenta de Instagram como parte de nuestra labor periodística, pudimos darnos cuenta de que había eliminado los posts correspondientes al Clásico Mundial de Béisbol.
En su cuenta habían varias fotos alusivas al evento, como fotos con sus compañeros o entrenando. También tenía fotos de la bandera patria y una en donde mostraba el calzado que utilizó a lo largo de la campaña.
No tenemos capturas de pantalla de su cuenta previo a la eliminación de las fotos, pero con revisar la fecha de sus últimas publicaciones es suficiente para darse cuenta de que algo anda mal, pues el es habitual en Instagram; postea mucho a lo largo de la semana. Lo último que se ve en la cuenta de «Miggy» es una foto de hace dos semanas.
Puede que esté apenado por los resultados conseguidos por él y sus compañeros y quiso borrar todo indicio de que siquiera participó en el Clásico y que juega para Venezuela, dejando sólo muestras de su inmenso talento con los Tigres de Detroit; o puede que se haya hartado de los numerosos comentarios de aficionados que criticaron la actuación suya y de sus compañeros en el torneo.
Muchas veces las figuras públicas no saben cómo manejar situaciones negativas como estas y recurren a medidas extremas como esta, que quizás pueden pasarle factura más adelante. Las críticas que Cabrera recibirá, o más bien, ya recibe por querer desligarse de la selección, el torneo y todo lo que esto conlleva, serán peores y más duras que las que puede haber recibido por su rendimiento y el de la selección.
Para más prueba de que lo que aquí se asegura es cierto, podemos observar los comentarios que han dejado fanáticos molestos en lo que ahora es su última publicación en Instagram, en la que casualmente sale posando para una sesión de fotos de los Tigres de Detroit.
«Por esa camisa si das la cara… me da pena ajena.»
«Que fatal que por haber tenido un mal clasico borres todo de aqui. Esperaba mas de ti porque eres un fenómeno. Pero bueno..»
«Que paso @miggy24 nunca fuiste al Clásico? Tanto faranduleo y ahora borras las fotos, así será la vergüenza.»
Estos son algunas de las opiniones y comentarios que pudimos recuperar de entre lo mucho que se dice.